MillyJohnson

DOMICILIO... O REPARTIDOR A DOMICILIO

una casa amplia, decoración en colores metálicos, una dueña exigente, con ojos oscuros, ojos que te acogían sin preguntarte, en su mano un buen libro no podía faltarle, una sonrisa de chica buena era algo que así como su bolsa  no podía olvidarle. Hasta una hormiga en su palma de la mano, se sentiría intimidada, esta hormiga podría sentirse como en su casa o sentirla como aquella que sin pensar de un solo pisar, derivaría su colmena. Este tipo de emoción y de tensión, es excitante, como este sentimiento de llegar a explotar como boca de volcán, una erupción total.

7:00am  Toc, toc...

mmmm ahhh (suspiro) 

Abrí mis ojos, y la luz de mi ventana ilumino mi rostro (volvió a quedarse dormida) lo suave de mi cama me abrazo justo a lo ancho de mis caderas.

toc,toc 

¡Quién carajos se atreve a tocar mi puerta!

que tal si utilizas la lengua, llegará aquel sabor directo a las papilas gustativas.

Ella es el deseo disfrazado de peligro. No necesita levantar la voz para hacerse notar; su sola presencia impone. Su mirada es un abismo, profunda y oscura, como si pudiera desnudar el alma con solo posar los ojos sobre ti. Y lo hace… no por curiosidad, sino por puro control. Ella no busca compañía: elige víctimas. Camina como si el mundo fuera suyo y los demás meros actores en su escenario. La seducción es su arma, el dominio su juego. Su voz es un veneno dulce, cada palabra cargada de intención, cada silencio lleno de amenazas disfrazadas de promesas. Juega con los límites del deseo y el miedo, y lo hace con una elegancia letal. Sabe cuándo tocar, cuándo apartarse, cuándo ofrecer una sonrisa que arde más que cualquier caricia. Nada en ella es accidental; todo está calculado, planeado, ejecutado con precisión. Es una tempestad en cuerpo de mujer. Un eclipse que no deja escapar la luz. Una reina sin trono, pero con todos a sus pies… incluso mientras los destruye suavemente.