MichelleWilliams

Hola, muy gusto de ser Michelle, estoy muy feliz de que quieras conocer más detalles sobre mi vida.

Hola, encantada de conocerla, soy Michelle, estoy muy contenta de que quiera saber más detalles sobre mi vida.

Buenos días, encantado de conocerte, me llamo Michelle, estoy muy feliz de que desees saber más sobre mi vida.

Soñador imparable. De silencios extraños y placeres extraños. Es un personaje digno de la realidad. Disfruto pasar un buen rato con un hombre que le gusta satisfacer mis deseos, mis fantasías para que yo pueda cumplir también las suyas.

Si me quieres, quiéreme entera, no por zonas de luz o sombra… Si me quieres, quiéreme negra y blanca, y gris, verde, y rubia, y morena… Quiéreme día, quiéreme noche… ¡Y madrugada en la ventana abierta!… Si me quieres, no me recortes: ¡Quiéreme toda… O no me quieras.

Un soñador imparable. De extraños silencios y extraños placeres. Este es su personaje digno de la realeza. Disfruto pasar un buen rato con un hombre que le gusta complacer mis deseos, mis fantasías para que también pueda cumplir con los suyos.

Si me amas, amame entero, no por áreas de luz o sombra. Si me amas, amame blanco y negro, y gris, verde, y rubia, y morena... amame de día, amame de noche. Y temprano en la mañana en la ventana abierta! Si me amas, no me cortes, me amas todo. O no me quieras.

Es un soñador imparable. Los silencios extraños y los placeres extraños. Es un hijo digno de la realeza. Me gusta pasar un buen rato con un hombre que me gusta satisfacer mis deseos, mis fantasías para que yo también pueda realizar las suyas..

Si me amas, amame todo, no por zonas de luz o de sombra. Si me quieres, me amas negro y blanco, gris, verde y rubio, marrón... me amas de día, me amas de noche. ¡Y mañana a la ventana abierta! Si me amas, no me cortes la palabra: No me quieres..

Esa extraña belleza con la que me miras te hace incomparable. De magia única y extraña belleza con una bella silueta y un soberbio carácter. Pasar buenos momentos bailando géneros urbanos, siendo sensual y caliente para que veas mis ojos y te hipnotices.

Por tus ojos verdes me perdería, sirena de aquellos que Ulises amaba y temía. Por tus ojos verdes me perdería. Por tus ojos verdes en lo que, fugaz, brillan, a veces, la melancolía; por tus ojos verdes tan llenos de paz, misteriosos como la esperanza mía; por tus ojos verdes, conjurar eficaz, yo me salvaría.

Esa extraña belleza con la que me miras te hace incomparable. De magia única y extraña belleza con una hermosa silueta y un carácter soberbio. Pasándolo bien bailando géneros urbanos, siendo sensual y caliente para que puedas ver mis ojos y estar hipnotizado.

Por tus ojos verdes lo extraño, sirena de aquellos que Ulises, sagaz, amado y temido. Por tus ojos verdes lo extraño. Por tus ojos verdes en lo que, fugaz, a veces la melancolía por lo general brilla; por tus ojos verdes tan llenos de paz, misterioso como mi esperanza; por tus ojos verdes, hechizo eficaz, me salvaría.

Esa extraña belleza con la que me miras te hace incomparable. Una magia única y una extraña belleza. Con una bella silueta y un carácter magnífico. Tomar el tiempo para bailar géneros urbanos, ser sensual y caliente para que puedas ver mis ojos y ser hipnotizado.

Por tus ojos verdes me falta, sirena de los que Ulysses, sagace, amado y temido. Vertiendo tus ojos verdes me falta. Para tus ojos verdes en lo que, efémero, a veces, la melancolía brilla generalmente; para tus ojos verdes tan llenos de paz, misteriosos como mi esperanza; para tus ojos verdes, tipo eficaz, me salvaría.

Es vivaz, locuaz, perenne. Delicada, como la flor de los lirios. Me lleva a la encrucijada. Me encanta tu cuerpo con solo tocar tu cabello. El rojo es mi color fuerte como el de la pasión, el amor, la fuerza y la locura.

Te ofrezco entre racimos, verdes gajos y rosas, Mi corazón ingenuo que a tu bondad se humilla; No quieran destruirlo tus manos cariñosas, Tus ojos regocije mi simple regalo. En el jardín sombroso mi cuerpo cansado Las auras matutinas cubrían de rocío Como en la paz de un sueño se desliza a tu lado El fugitivo instante que descansa ansío. Cuando en mi mente se calme la tempestad divina, me reclinaré, jugando con tus gruesos rizos, sobre tu núbil seno mi frente soñolienta, sonora con el ritmo de tus últimos besos.

Es animado, hablador, perenne. Delicado, como la flor de los lirios. Me lleva a la encrucijada. Me encanta tu cuerpo sólo por tocar tu cabello. El rojo es mi color fuerte como el de la pasión, el amor, la fuerza y la locura.

Te ofrezco entre racimos, segmentos verdes y rosas, mi corazón ingenuo que se humilla ante tu bondad, tus manos amorosas no quieren destruirlo, tus ojos se regocijan en mi sencillo regalo. En el jardín sombreado mi cuerpo cansado las auras de la mañana cubiertas de rocío como en la paz de un sueño me deslizo a tu lado el momento fugitivo que anhelo descansar. Cuando la tempestad divina se calme en mis templos, me reclinaré, jugando con tus gruesos rizos, en tu pecho nubile mi somnoliente frente, sonando con el ritmo de tus últimos besos.

Es vivo, hablador, perenne. Delicado, como la flor de lirios. Eso me llevará al paso. Me gusta tu cuerpo nada más que tocar tu cabello. El rojo es mi color fuerte como el de la pasión, del amor, de la fuerza y de la locura.

Te propongo entre las uvas, los segmentos verdes y las rosas, mi corazón ingenuo que se humilla ante tu bondad; tus manos amorosas no quieren destruirlo, tus ojos se regocijan de mi sencillo regalo. En el jardín sombreado mi cuerpo cansado Las auras de la mañana cubiertas de rosas Como en la paz de un sueño me deslice a tu lado El momento fugitivo que aspiro a descansar. Cuando la tempestad divina se calme en mis templos, me recostaré, jugando con tus gruesos rizos, en tu seno nupcial mi frente dormida, sonnez al ritmo de tus últimos besos.

¡¡Oh, extraña belleza! ¡No puedo creerlo! Me entrego a la eternidad, me inmortaliza. Hora de darte un beso y quedarte conmigo. Te animas a probar el sabor latino, capaz de enamorarte con lo que un simple deseo te provoca..

Como si cada beso fuera de despedida, Cloé mía, besémonos, amando. Tal vez ya nos toque en el hombro la mano que llama A la barca que no viene sino vacía Y que en el mismo haz Ata lo que fuimos mutuamente Y la suma ajena universal de la vida.

¡Oh, qué belleza tan extraña! Me entrego a la eternidad, me inmortaliza. Es hora de besarte y quedarte conmigo. Si te atreves a probar el sabor latino, puedes enamorarte de lo que un simple deseo provocará en ti..

Como si cada beso fuera una despedida, mi Chloe, vamos a besarnos, amorosamente. Tal vez sea nuestro turno en el hombro la mano que llama al barco que no viene sino vacío y que en el mismo haz une lo que éramos el uno al otro y la suma alienígena universal de la vida.

¡Qué belleza tan extraña! Me abandono a la eternidad, ella me inmortaliza. Es hora de besarte y quedarte conmigo. Si os atrevéis a probar el sabor latino, quizá os enamoréis de lo que un simple deseo provocará en vosotros..

Como si cada beso fuera una despedida, Ma Chloé, un beso, un amor. Tal vez sea nuestro turno En el hombro la mano que llama Al barco que viene sólo vacío Y eso en el mismo haz Mentir lo que éramos el uno al otro y la suma universal y extraterrestre de la vida.

Piel canela, corazón único y diferente a los demás, no te permitas creer que no puedes estar conmigo, de hecho amo probar el corazón de un buen hombre.

Amar es este tímido silencio cerca de ti, sin que lo sepas, y recordar tu voz cuando te vas y sentir el calor de tu saludo. Amar es esperar como si fueras parte del ocaso, ni antes ni después, para que estemos solos entre los juegos y los cuentos sobre la tierra seca.

Piel de canela, corazón único y diferente de los demás, no te permitas creer que no puedes estar conmigo, de hecho me encanta probar el corazón de un buen hombre.

Amar es este tímido silencio cerca de ti, sin que lo sepas, y recordar tu voz cuando te vas y sentir el calor de tu saludo. Amar es esperarte como si fueras parte de la puesta de sol, ni antes ni después, para que estemos solos entre juegos e historias en la tierra seca..

Piel de canela, corazón único y diferente de los demás, no te permitas creer que no puedes estar conmigo, de hecho me gusta probar el corazón de un buen hombre.

Ama ese silencio tímido cerca de ti, sin que lo sepas, y recuerda tu voz cuando te vayas y siente la calidez de tu saludo. Amar es esperar como si fueras parte del atardecer, ni antes ni después, para que estemos solos entre juegos e historias en la tierra firme..

A veces me apetece maldecir para decir: "Te amo con locura". A veces me apetece ser tonto para gritar: ¡La quiero tanto!

Quiero llorar porque te amé demasiado, quiero morir porque me diste la vida, ay, amor mío, ¿será que nunca tendré paz? Será que todo lo que hay en mí sólo quiere decir saudades. Y ya no sé lo que va a ser de mí, todo me dice que amar será mi fin. Qué desesperación trae el amor, yo que no sabía lo que era el amor, ahora sé porque no soy feliz.

A veces me siento como que soy cursi para decir: te amo como una loca. A veces me siento como si fuera estúpido gritar: ¡La amo tanto!

Quiero llorar porque te amé demasiado, quiero morir porque me diste vida, oh, mi amor, ¿nunca tendré paz? Todo lo que hay en mí significa saudade. Y ni siquiera sé qué me va a pasar, todo me dice que amar será mi fin. Lo desesperado que es el amor, no sabía lo que era el amor, ahora lo sé porque no soy feliz.

A veces me apetece decir: "Te quiero como una loca". A veces, siento que soy estúpido gritando: ¡Lo amo tanto!

Quiero llorar porque te amo demasiado, quiero morir porque me diste la vida, oh, amor mío, ¿no tendré nunca la paz? Es que todo lo que está en mí significa sólo saudade. Y no sé qué me va a pasar, todo me dice que amar será mi fin. Como el amor desesperado trae, yo no sabía lo que era el amor, ahora lo sé porque no estoy contento.

Cube, amor, el cielo de la boca con esa espuma arrebatada extrema, que es jazmín del que sabe y del que quema, brotado en punta de coral de roca.

Yo no quiero morirme sin saber de tu boca. Yo no quiero morirme con el alma perpleja sabiéndote distinto, perdido en otras playas. Yo no quiero morirme con este desconsuelo por el arco infinito de esa cúpula triste donde habitan tus sueños al sol de mediodía. Yo no quiero morirme sin haberte entregado las doradas esferas de mi cuerpo, la piel que me recubre, el temblor que me invade. Yo no quiero morirme sin que me hayas amado.

Cubre, amor, el techo de mi boca con esa espuma extrema, que es jazmín de los que saben y de los que arden, brotado en la punta del coral de roca.

No quiero morir sin oír de tu boca. No quiero morir con el alma perpleja sabiendo que eres diferente, perdido en otras playas. No quiero morir con esta tristeza por el arco infinito de esa cúpula triste donde viven tus sueños bajo el sol del mediodía. No quiero morir sin haberte dado las esferas doradas de mi cuerpo, la piel que me cubre, el temblor que me invade. No quiero morir sin que me ames.

Cubre, amor mío, el paladar de mi boca de ese escumo extremadamente encantador, que es el jazmín de los que saben y de los que arden, empujado a la punta del coral rocoso.

No quiero morir sin escuchar lo que dices. No quiero morir con el alma perpleja sabiendo que soy diferente, perdida en otras playas. No quiero morir con esta tristeza a través del arco infinito de esta cúpula triste donde viven tus sueños bajo el sol del mediodía. No quiero morir sin darte las esferas doradas de mi cuerpo, la piel que me cubre, el temblor que me invade. No quiero morir sin que me ames.

Tus ojos me recuerdan las noches negras de verano, noches sin luna, orillas de mar salado, y el resplandor de estrellas del cielo negro y bajo. Tus ojos me recuerdan las noches de verano. Y tu carne morena, los cereal requeridos, y el suspirar de fuego de los campos maduros.

¿¿Mi tierra? Mi tierra eres tú. ¿Mi gente? Mi gente eres tú. El destierro y la muerte para mí están donde no estás tú. ¿Y mi vida? Dime, mi vida, ¿qué es, si no eres tú?

Tus ojos me recuerdan las noches negras de verano, las noches sin luna, la orilla del mar salado, y las estrellas brillantes del cielo negro y bajo. Tus ojos me recuerdan las noches de verano. Y su carne marrón, el trigo quemado, y el suspiro de fuego de los campos maduros.

¿Mi tierra? Mi tierra eres tú. ¿Mi gente? Mi gente son ustedes. Exilio y muerte para mí son donde tú no estás y mi vida? Dime, ¿qué es mi vida si no eres tú?

Tus ojos me recuerdan las noches negras de verano, las noches sin luna, la orilla del mar salado y las estrellas brillantes del cielo negro y bajo. Tus ojos me recuerdan las noches de verano. Y tu silla marrón, el trigo quemado y el sopir de fuego de los campos maduros.

¿Qué es? Ma tierra, eres tú. ¿Mi pueblo? Mi pueblo, eres tú. Exilio y muerte para mí, ¿están aquí no estás aquí y mi vida? Dime, ¿qué es, si no eres tú?

De tu morena gracia, de tu sueño gitano, de tu mirada de sombra quiero llenar mi vaso. Me emborracharé una noche de cielo negro y bajo, para cantar contigo, orilla al mar salado, una canción que deja cenizas en los labios. De tu mirada de sombra quiero llenar mi vaso.

Ni recuerdos ni presagios: Sólo presente, cantando. Ni silencio, ni palabras: tu voz, sólo, sólo, hablándome. Ni manos ni labios: tan solo dos cuerpos, muy lejos, separados. Ni luz ni oscuridad, ni ojos ni mirada: visión, la visión del alma. Y por fin, por fin, ni goce ni pena, ni cielo ni tierra, ni arriba ni abajo, ni vida ni muerte, nada solo el amor, solo amor.

Quiero llenar mi vaso con tu gracia oscura, con tu sueño gitano, con tu mirada sombría. Me emborracharé una noche con un cielo negro y bajo, para cantar contigo, en la orilla del mar salado, una canción que deja cenizas en mis labios. Por tu mirada sombría quiero llenar mi vaso.

Neither memories nor omens: sólo presente, cantando. Ni silencio, ni palabras: tu voz, sólo, sólo, me habla. Ni manos ni labios: sólo dos cuerpos, a la distancia, separados. Ni luz ni oscuridad, ni ojos ni mirada: visión, visión del alma. Y finalmente, ni placer ni dolor, ni cielo ni tierra, ni arriba ni abajo, ni vida ni muerte, nada más que amor, sólo amor.

Quiero llenar mi copa de tu gracia oscura, de tu sueño gitano, de tu mirada oscura. Me emborracharé en una noche de cielo negro y bajo, para cantar contigo, a orillas del mar salado, una canción que deja cenizas en mis labios. De tu mirada de sombra quiero llenar mi vaso.

Ni recuerdos ni presagios: sólo presente, en canto. Ni silencio, ni palabras: tu voz, sólo, sólo, me hablo. Ni las manos ni los labios, sólo dos cuerpos, lejos, separados. Ni luz ni oscuridad, ni ojos ni mirada: visión, la visión del alma. Y finalmente, ni placer ni dolor, ni cielo ni tierra, ni arriba ni abajo, ni la vida ni la muerte, nada más que amor, sólo amor..