
La intimidad es un aspecto fundamental del bienestar general, pero a menudo se subestima la influencia de nuestra salud física en esta ecuación. Más allá de la estética, la forma física tiene un impacto directo en nuestra energía y resistencia. La actividad física regular mejora la circulación sanguínea, un factor esencial para el rendimiento íntimo tanto en hombres como en mujeres.
Aunque el deporte diste mucho de ser un placer para algunos, puede contribuir en gran medida a mejorar la vida sexual. Además, el ejercicio contribuye a la regulación hormonal, refuerza los músculos del suelo pélvico y reduce el estrés. Todo ello estimula no sólo la función física, sino también el deseo. En el resto de este artículo, descubrirás algunos ejercicios prácticos para mejorar tu rendimiento en la cama.
7 ejercicios de fitness para mejorar tu vida sexual
Afortunadamente, no hace falta ser un atleta para aprovechar los beneficios del deporte. Aquí tienes 7 ejercicios de fitness sencillos pero eficaces para mejorar tu vida sexual.
El giro de cadera
Para empezar, adopta una postura amplia y relaja las piernas para que las rodillas estén flexibles. Mantén los codos pegados al cuerpo, dobla los brazos y coloca las manos a los lados. A continuación, colóquese sobre la planta del pie derecho, gire las caderas y balancee los glúteos hacia la izquierda.
Deja caer el talón derecho y repite el mismo movimiento con el pie izquierdo. Tu cuerpo se tonifica y tus caderas y glúteos se relajan. Además, tu ritmo cardíaco mejora.
Sentadillas de rodilla
Ponte de pie, separa las piernas y apunta con los pies hacia fuera. Extienda los brazos hacia delante. Baje las nalgas hasta que los muslos queden paralelos al suelo. Desde esta posición, apóyese en el talón derecho mientras desliza simultáneamente el talón izquierdo. A continuación, cambie al lado izquierdo, gire el talón y la rodilla izquierda y coloque el codo izquierdo detrás de usted.
A continuación, lleve el talón izquierdo hacia atrás y, con la mano izquierda, desplácese de delante hacia atrás. Repita con la derecha. Este ejercicio relaja las caderas al tiempo que fortalece las piernas, los abdominales y los oblicuos.
La rana
Ponte de pie, con los talones juntos y los dedos de los pies apuntando hacia fuera. Junta las manos frente a ti, con las palmas hacia abajo. Manteniendo los hombros alineados con las caderas, apoye los talones en el suelo y coloque las rodillas hacia fuera. Baje lentamente las nalgas hacia el suelo, como si imitara a una rana. Al hacerlo, déjese caer lentamente, con las nalgas hacia abajo.
Imagina que estás haciendo yoga y junta las manos por encima de la cabeza. Presiona sobre los dedos de los pies, suelta las manos y vuelve a la posición inicial. Este ejercicio abre las caderas y fortalece los muslos, las nalgas y los músculos abdominales. También es una buena forma de mejorarel equilibrio.
El pájaro
Con el cuerpo ligeramente flexionado, el pecho levantado, los brazos doblados y las manos entrelazadas, mantén el cuerpo en posición curva. Abre la rodilla izquierda hacia un lado y da un pequeño paso hacia la izquierda. Balancea el pecho hacia la izquierda y abre los brazos, de modo que el brazo derecho quede delante de ti y el izquierdo detrás.
Vuelva a la posición inicial y repita el ejercicio con el lado derecho. Este ejercicio tonifica los cuádriceps, los glúteos, las pantorrillas y la parte superior de la espalda. Gracias a él, podrás sentarte a horcajadas sobre tu pareja sin riesgo de bloquear la espalda.
Cardio o ejercicio aeróbico
Al hacer ejercicio, aumenta el ritmo cardíaco y mejora la resistencia cardiorrespiratoria. Esto mejora la circulación sanguínea en todo el cuerpo. Un mejor flujo sanguíneo en el cuerpo también favorece unas mejores sensaciones sexuales.
El ejercicio también estimula la producción de endorfinas. Estas hormonas son las responsables de la sensación de placer y euforia que se siente después de un buen entrenamiento.
Bailar
El baile es una actividad dinámica y expresiva que implica a todo el cuerpo. Mejora la flexibilidad, la fuerza muscular y la resistencia, una combinación perfecta para una vida sexual plena. A nivel hormonal, bailar tiene un impacto positivo en la libido, porque al bailar, el cuerpo libera endorfinas, las hormonas de la felicidad que estimulan la libido.
Pilates
Este método de ejercicio se centra en fortalecer los músculos profundos, mejorar la postura y estabilizar el núcleo. Al fortalecer los músculos del suelo pélvico, el Pilates ayuda a controlar mejor los músculos de esta zona durante el coito, lo que contribuye a mejorar las sensaciones.
¿Por qué el deporte tiene un impacto positivo en las relaciones sexuales?
El ejercicio regular estimula la producción de endorfinas, los neurotransmisores que producen una sensación de bienestar y placer. Estas hormonas también mejoran el humor y la confianza en uno mismo, contribuyendo a una vida sexual más satisfactoria.
Además, el deporte ayuda a mantener un peso saludable y a mejorar la circulación sanguínea. Esta última es esencial para una función sexual óptima, ya que favorece el flujo sanguíneo hacia los genitales, intensificando las sensaciones y facilitando el orgasmo. En cuanto a las hormonas, el deporte aumenta los niveles de testosterona, una hormona esencial para el deseo sexual tanto en el hombre como en la mujer. La testosterona desempeña un papel clave en la libido, la función eréctil y la lubricación vaginal.
¿Cómo conseguir más resistencia en la cama?
He aquí algunos consejos para aumentar el vigor en la cama.
Intente mantener relaciones sexuales con la vejiga completamente vacía o llena.
Para tener más resistencia sexual, te aconsejamos que pruebes apracticar sexo con la vejiga completamente vacía o, por el contrario, con la vejiga bastante llena, pero no tanto como para no poder contenerte, por supuesto. La idea es que la vejiga puede provocar tensión en los músculos perineales cuando está llena. Estos músculos pélvicos también contribuyen a la eyaculación masculina.
Por ejemplo, algunos hombres afirman quecontrolan mejor su eyaculación, y a veces tienen una mejor erección, cuando la vejiga está llena. A otros, en cambio, les resulta más fácil eyacular con la vejiga vacía. Así que tú decides qué es lo que mejor se adapta a tu cuerpo.
Penetra suavemente al principio del coito
Cuando se trata de la primera penetración del coito, algunos sexólogos recomiendan una penetración muy lenta. Como si estuvieras saboreando cada milímetro de penetración, esta primera penetración debe ser muy gradual, muy lenta, para construir suavemente laexcitación sexual. Esto permitirá al pene, y en particular al glande, acostumbrarse a las variaciones de temperatura, presión e incluso lubricación.
Muscular el perineo
Existe un sencillo ejercicio que puedes realizar fuera del coito para mejorar el control de la eyaculación. Se trata de aprender a identificar los músculos del perineo y sus esfínteres. Son los mismos músculos que se utilizan para controlar la eyaculación.
El ejercicio consiste en contraerlos o relajarlos voluntariamente mientras orinas. Para ello, siéntese en el inodoro con la espalda recta y las piernas ligeramente separadas. Cuando llegue el momento de orinar, relájalos para que la orina salga de forma natural, sin forzar.
En definitiva, incorporar ejercicio físico específico a tu rutina no es sólo cuestión de fuerza. Es un enfoque holístico para mejorar la resistencia, la flexibilidad y la circulación, elementos clave para mejorar el rendimiento íntimo y establecer una conexión más profunda con tu cuerpo. Si, a pesar de estos consejos, no notas ninguna mejora, no dudes en ponerte en contacto con un sexólogo.