
La sexualidad sigue siendo un tema tabú para muchas personas. Sin embargo, es esencial recordar que forma parte de un estilo de vida equilibrado, al igual que una dieta sana. ¿Ha notado una disminución del deseo sexual sin saber por qué? No está solo: es una situación común que puede estar relacionada con factores físicos, psicológicos o incluso ambientales.
La buena noticia es que es posible actuar sobre estos factores con soluciones sencillas para recuperar una vida sexual plena. En el resto de este artículo, te ofrecemos algunos consejos sencillos pero eficaces para mejorar tu vigor sexual.
Alimentos y nutrientes para mejorar la salud sexual
Descubre a continuación los alimentos y nutrientes para potenciar tu forma física sexual.
Maca
La maca es un estimulante hormonal tanto para hombres como para mujeres. Esta planta peruana antifatiga devuelve el vigor y la energía a quienes la consumen. En realidad, no es un afrodisíaco, sino más bien un adaptógeno que actúa como estimulante hormonal global. Esto se traduce en una reducción del cansancio matutino, una menor necesidad de dormir para recuperarse y una mejor concentración a lo largo del día. Esta sensación de rápido bienestar se explica por la estimulación de las glándulas suprarrenales, que favorece un aumento de las distintas hormonas esenciales para el vigor sexual.
Tribulus terrestris
El fruto de esta planta, que crece en Europa del Este, es perfecto para aumentar la libido y mejorar las disfunciones eréctiles debidas a un bajo nivel de testosterona. Numerosos estudios clínicos han constatado un aumento del 30% de los niveles de testosterona en personas que tomaron regularmente 750 mg de esta planta durante dos o tres meses, sin ningún efecto secundario.
El aumento de testosterona en el organismo conduce directamente a una intensificación de la libido tanto en los hombres como en las mujeres. El tribulus parece tener los efectos de una hormona, aunque no lo sea. Los tribulósidos que contiene se unen a los receptores del hipotálamo y estimulan la hipófisis. Esta última aumenta entonces el nivel de LH (hormona luteinizante), que a su vez estimula las células de Leydig de los testículos, dando lugar a la producción de testosterona libre.
Fucus chino
Esta planta está destinada a los hombres con dificultades de erección. En la medicina china, se utiliza tradicionalmente para reforzar la energía (Qi) de los riñones. La dosis es de 1 gramo al día en cápsulas o comprimidos, que se toman por la mañana y a mediodía.
Muira puama
La corteza de este arbusto brasileño es utilizada tradicionalmente por los pueblos indígenas amazónicos para tratar la impotencia. Sin embargo, es importante señalar que ningún estudio científico fiable ha podido determinar todavía la dosis a la que la Muira puama es eficaz. La Muira puama puede encontrarse sola o a veces combinada con otras plantas afrodisíacas en complejos.
Ginseng (Panax)
Un tratamiento de una semana con ampollas de ginseng puede dar un verdadero impulso al organismo. De hecho, el ginseng siberiano no tiene ningún efecto directo sobre la libido, pero mejora la calidad de la erección al favorecer la circulación sanguínea. El ginseng siberiano debe tomarse diariamente por la mañana durante un máximo de una o dos semanas, con un período de descanso de la misma duración antes de reanudar el tratamiento.
Ginkgo biloba
Conocido como el «árbol de los cuarenta écus», el Ginkgo no está clasificado como afrodisíaco. Sin embargo, actúa innegablemente sobre la circulación sanguínea, mejorando la vascularización de las zonas pélvicas tanto del hombre como de la mujer. Se recomienda tomar de 120 a 180 mg de extracto antes de la cena, a menos que la persona esté en tratamiento anticoagulante, ya que esta planta no es compatible con dicho tratamiento.
Rhodiola rosea
Según estudios realizados en Rusia, la toma de rhodiola mejoró la función eréctil en más del 85% de los casos. Esto tiene sentido, ya que esta planta es conocida por aumentar la resistencia al estrés y combatir la fatiga. Para aprovechar los beneficios de la Rhodiola rosea, se recomienda tomar de 350 a 700 mg al día, idealmente por la mañana en ayunas o media hora antes del desayuno.
Azafrán
Desde la antigüedad, el azafrán es conocido por sus propiedades afrodisíacas. En la medicina tradicional persa, el Ayurveda y otras culturas, se recomendaba para estimular la libido y mejorar el estado de ánimo. Derivada de los estigmas secos de la planta crocus, esta especia es rica en compuestos activos como la crocina y el safranal. Estas sustancias tienen propiedades antioxidantes y antidepresivas. Al mejorar la circulación sanguínea y actuar sobre ciertos neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, el azafrán favorece la excitación y el placer sexual.
Alholva
Utilizado desde la antigüedad en la India, Oriente Próximo y Egipto, el fenogreco es una antigua especia y planta medicinal. En Ayurveda, el fenogreco, o Methi, se considera un tónico digestivo y un aliado de la salud femenina. Antiguamente se le atribuían virtudes galactógenas y afrodisíacas. También se utilizaba en el antiguo Egipto como remedio para aumentar el deseo. Además, sus semillas son ricas en saponinas esteroideas, como la diosgenina, que ayudan a equilibrar las hormonas sexuales y favorecen la función reproductora.
Según estudios recientes, el fenogreco es realmente eficaz para aumentar la libido, gracias a su acción sobre las hormonas. Un ensayo controlado aleatorizado realizado en 80 mujeres que sufrían de bajo deseo demostró que la toma diaria de 600 mg de extracto de fenogreco durante 8 semanas aumentaba significativamente el deseo y la excitación sexual, en comparación con un placebo.
Ashwagandha
La ashwagandha, a menudo apodada «ginseng indio», es una planta importante en la medicina ayurvédica. Desde la antigüedad, se ha utilizado en la India para estimular la energía, la longevidad y el rejuvenecimiento. Es un afrodisíaco de renombre que mejora la salud sexual en general.
En la doctrina ayurvédica, la ashwagandha se considera una planta rejuvenecedora (rasayana) y afrodisíaca (vajikarana). Su nombre sánscrito, que significa «la fuerza de un caballo», ilustra su acción, que devuelve el vigor al cuerpo y a la mente. Su acción principal es reducir el cortisol, la hormona del estrés, y favorecer el equilibrio neurohormonal. Esta acción elimina ciertos bloqueos psicológicos que pueden afectar a la libido.
Las consecuencias de una disminución de la vitalidad sexual
Una disminución de la libido puede tener un impacto negativo en la vida afectiva, especialmente en pareja. Aunque la actividad sexual no sea una necesidad vital, sigue siendo beneficiosa para el organismo. De hecho, cuando uno de los miembros de la pareja experimenta un descenso del deseo, la sexualidad puede convertirse en una fuente de conflictos y malentendidos en la pareja. A largo plazo, una vida sexual a media asta puede provocar sufrimiento, frustración e incluso una ruptura. Pero una sexualidad plena puede ser una gran fuente de satisfacción y felicidad para la pareja.
Una buena salud sexual refleja un estilo de vida sano. Una dieta equilibrada, unos hábitos saludables y la gestión del estrés son las claves para estimular de forma natural el vigor y el bienestar íntimo. Evite los alimentos ricos en grasas y azúcares poco saludables, ya que son perjudiciales para la libido.