La fantasía de la suegra es muy común. Tanto que parece que más de la mitad de los hombres han fantaseado con sus suegras. Y no sólo eso. Pero a veces es al revés. No eres tú quien fantasea, sino ella. Entonces, ¿cómo puedes saber si tu suegra va a por ti?

Si las milfs y los pumas no son lo tuyo, puede que tu vecina sí lo sea. De hecho, más de la mitad de los hombres casados fantasean con la «belle doche». Un estudio realizado por Peter Hahn lo confirma, tras entrevistar a casi 1.500 caballeros con una alianza en el dedo anular. Una cifra impresionante.

Si llevamos las cifras un paso más allá, podríamos sorprendernos. Una cuarta parte de los maridos siente una atracción irresistible por su suegra, mientras que casi un tercio imagina que ella está secretamente colada por ellos. Y lo que es más preocupante, uno de cada seis hombres casados considera que su mujer es menos atractiva que su madre, y uno de cada ocho admite que su suegra tiene más estilo que la que comparte su cama. Es una lástima. Siempre está mal visto dejar a la hija para jugar con la madre. Pero ¡hazlo a tu manera!

Sin embargo, no te devanes los sesos innecesariamente, porque el 80% de los maridos dicen que se llevan muy bien con la madre del amor de su vida. Es una noticia tranquilizadora, y normaliza el afecto que sientes por tu suegra (y viceversa). A menos que tu suegra te esté prestando demasiada atención, en cuyo caso puede que haya gato encerrado. Así que, ¿cómo puedes saber realmente si tu madrastra quiere atraparte y ponerte contra la pared? Hay algunos signos reveladores..

Señales para descifrarla

¿Tienes la impresión de que tu tía buena se te insinúa? Puede que te llamen paranoico o celoso, pero podría ser cierto.

1 –Evita hablarte demasiado tiempo por teléfono

Cuando te llama, te pide inmediatamente que le pongas a su hija al teléfono. Sin preámbulos, sin preliminares vocales, sólo lo mínimo. No es porque no te soporte, no. Es porque sabe que si interactúa contigo durante demasiado tiempo, dejará salir algunos de los impulsos que ha estado reprimiendo todo este tiempo. Fantasea con tu culo y tu polla, y sabe que está prohibido.

2 – Tevuelve a invitar a comer a su casa todas las semanas

Suele ser el famoso domingo que pasamos en casa de la suegra. Mitad por placer y comodidad, mitad por obligación. Pero es una buena cocinera, así que hay que aprovecharlo. Sin embargo, hay algo que te molesta: todos sus platos tienen una connotación sexual: espárragos, berenjenas, un plato en salsa, etc. Es difícil permanecer estoico ante esto. Te excita o te molesta, porque puedes sentir que Madame necesita un hombre sano y vigoroso. Y tú estás ahí, delante de ella. Seguro que te excita. Y lo que es más, delante de su marido y su hija. Tiene mucho valor (bueno, quizá no por mucho tiempo… ).

3 –Se ha divorciado recientemente

Lleva 30 años casada, pero la unión se rompió hace poco. Engaño, aburrimiento, necesidad de autorrealización, … lo que sea. No importa, el resultado es el mismo. Tiene hambre, quiere pasárselo bien y quiere a un hombre joven en su cama para poder excitarse por fin. Así que tu suegra es una de esas Milfs y Cougars. Pasará por todos los estados emocionales para conseguir tu atención y compasión, y finalmente salirse con la suya. Está que arde.

4 – Más y más insinuaciones

Para tu cumpleaños, te ha regalado una corbata y ha hablado de un notario. Habla de sus sofocos, dejando claro que tiene calor por todas partes. Está planeando unas vacaciones en el Ródano (69). Menciona una fuente. En resumen, o eres un pervertido o ella te está excitando. Tanto que temes que todo el mundo se entere.

5 – Critica a todos los ex de su hija

Por supuesto, esto halaga tu ego. Y entonces, estás de acuerdo en que los ex de su hija son unos imbéciles sin ninguna cualidad. Pero tú no eres perfecta (lo siento), aunque a ella le gustaría que creyeras lo contrario. Y a decir verdad, escucharla denigrar a sus ex hace que tu suegra suene al borde de la amargura, frustrada por no haber podido darles un mordisco. Es más, no para de decir que «tú» eres el hombre para su hija. Te empuja a los brazos de la niña, sólo para que te fijes en ella, psicología inversa. No caes en la trampa, bien hecho.

6 – Te pide que la tutees

¿Desde cuándo criáis cerdos juntos? ¡Muestra un poco de respeto! Primero fóllatela, dale unos azotes, hazle el perrito y tírale del pelo, y luego puedes pasar a las familiaridades.

7 – Le gusta ir detrás de ti en el coche

Para ella es más seguro sentarse detrás de ti. En primer lugar, porque si está en el asiento de al lado, le resulta difícil no ponerte la mano en el muslo. Así que es más seguro para ella sentarse detrás de ti. Puede mirarte y fantasear al ver tu cuello sin que parezca sospechoso. Y tu suegra puede agarrarse al asa para controlar su frustración sin que sea demasiado evidente. Es bonito verla luchar, pero es doloroso.

8 – Te ignora para que te fijes en ella

Ya te habrás dado cuenta de que tu madrastra pasa de ti sin mirarte. Evidentemente, forma parte de una estrategia bien urdida. ¿No te llamó después de su infarto? ¿Te ignoró en el funeral de su padre? Se le da bien hacerse la dura. Pequeña granuja.

9 – A veces se queda a dormir

Sobre todo cuando no está tu mujer. Aún recuerdas cuando nació tu hijo, y tu suegra se quedó a dormir allí mientras su hija estaba en la maternidad. Es más, llevaba puesto el camisón y la bata, todo lo necesario para subir la calefacción.

10 – Cuando vas a su casa, te dice » pontecómodo «

Esta es la última señal que puedes negar. Sobre todo cuando conoce tus pequeños hábitos, como andar desnudo, por ejemplo. El mensaje es claro. Es vergonzoso. Pero sabes mostrarte fuerte y no caerás en la trampa. Bien por ti.

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